¿Qué tipos de termos eléctricos existen?

En casas que no cuentan con una instalación de gas completa o en las que se prefiere utilizar la energía eléctrica, ya sea de la red convencional o de instalaciones renovables, se puede optar por un termo eléctrico para disfrutar cómodamente de agua caliente. Al igual que las calderas convencionales estos aparatos también necesitan un mantenimiento, y ante cualquier avería podrás avisar a SAT Férroli. Pero lo primero que deberemos saber es de qué tipo de termo se trata. Según su posición podemos diferenciarlos fácilmente entre verticales, horizontales o reversibles (aquellos que pueden funcionar en cualquiera de las dos formas). Sin embargo podría ser más interesante separar los tipos en función de las posibilidades de regulación que ofrecen, un concepto más útil de cara a elegir el termo correcto para nuestro hogar.

Temperatura fija: calientan el agua siempre a la misma temperatura, no existe la posibilidad de regularla. Suelen ser más baratos de adquirir, pero será más difícil controlar la eficiencia energética, por ejemplo, en verano.
Temperatura regulable: permiten regular la temperatura a la que se va a calentar el agua y por tanto adecuarla a cada época del año.

Además también se pueden diferenciar por la capacidad, de hecho Férroli ofrece termos para todos los segmentos. Tanto para demandas pequeñas, como puede ser el caso de los termos ‘Cubo’, como para grandes demandas de agua, como es el caso de los termos Classical 2000 que se instalan exclusivamente sobre suelo. Estos son solo algunos consejos para clasificarlos y para facilitar la decisión. Lo importante será instalar el sistema que más convenga a nuestras capacidades económicas y al tipo de hogar. También, por supuesto, mantener revisiones periódicas de cara a evitar problemas en el futuro.