Entre las tareas de mantenimiento de la caldera que se deben realizar de forma periódica está la de la limpieza. Un proceso meticuloso que debe ser realizado con sumo cuidado y con electricidad y llaves de paso cerradas. Lo ideal es contactar con el Servicio Técnico Oficial de la marca para asegurarse de que los aparatos son manipulados por expertos profesionales en la marca. Algunos consejos a seguir para las revisiones y limpiezas:
En primer lugar desconectar los aparatos de la electricidad, cerradas las llaves de paso del agua y del gas y seguir lo indicado por él fabricante en su manual de instrucciones y cumplir con la normativa vigente. Los Servicios Técnicos Oficiales, ofrecen la mejor garantía para estas funciones.
Una vez tenido en cuenta lo expuesto anteriormente, es cuando se da comienzo a una limpieza profunda y una correcta regulación de los parámetros de funcionamiento de los aparatos, realizando en el caso de las calderas, un análisis de combustión con equipos calibrados, certificando que el rendimiento y contaminantes, están dentro de los parámetros establecidos.
Las partes a tener en cuenta de cara a proceder a limpiarlas son: